Cuando se inyectan preformas, ya sea para consumo propio o para proveer a terceros, surge la problemática de su almacenamiento. Tradicionalmente existen dos alternativas principales, octabines o cajas de cartón colocados sobre pallets (one-way, el contenedor no regresa al fabricante) o contenedores de malla de alambre (opción reutilizable).
Estos últimos consisten en un armazón metálico, con placas (liners) de Polipropileno (PP), colocados en su interior que se ofrecen en diferentes colores y se pueden vender por separado.
Las ventajas de los canastos de malla de alambre frente a los octabines son las siguientes:
Los canastos de malla de alambre son reutilizables. Esto les hace recomendables desde un punto de vista tanto económico como medioambiental.
Pueden ser utilizados fácilmente con vehículos autoelevadores sin necesidad de pallets de por medio.
Cuentan con larga vida útil (entre 3 y 5 años dependiendo de las condiciones de uso).
Se pueden plegar para reducir el espacio de almacenamiento cuando no están en uso o al retornar al fabricante.
Considerando ambas alternativas, desde PET Packaging Network encontramos los contenedores de malla de alambre como una mejor solución, siempre y cuando no se trate de exportaciones y puedan ser reutilizados. Incluso en el caso de que se utilicen para exportaciones, podrían reutilizarse pero implicaría planificar la logística para que se envíen de vuelta.
Este tipo de contenedores ya forman parte de de nuestro amplio portfolio de soluciones para la industria. Los contenedores se fabrican en medidas estándar (1,20 x 1,00 m.), aunque también se pueden fabricar bajo pedido, de acuerdo a la necesidad del cliente, y su capacidad máxima puede variar.
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